Nada es imposible

Gustavo Sánchez, un orgullo para la comunidad de Lomas de Angelópolis, ha logrado lo que para muchos parecería imposible. Como atleta paralímpico de alto rendimiento, Gustavo ha representado a México en múltiples competencias internacionales, destacando en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y Tokio 2020, donde ganó múltiples medallas, incluyendo dos de oro.  Su determinación lo llevó a competir en Paris 2024 en varias disciplinas, específicamente en las categorías de natación. Participó en los 150 metros combinados SM4 y en los 50 metros libres S4. Aunque enfrentó una competencia difícil y no logró subirse al podio en esta ocasión, su desempeño sigue siendo un reflejo de su dedicación y espíritu inquebrantable como atleta de alto rendimiento, representando con orgullo a México a Puebla y a la comunidad de Lomas de Angelópolis en donde eligió vivir por la tranquilidad del lugar y la accesibilidad que tiene en todos lados para su condición. 

Desde pequeño, Gustavo ha superado obstáculos relacionados con su malformación congénita. Sin embargo, su espíritu indomable y el apoyo incondicional de su familia lo llevaron a descubrir su talento en la natación desde una edad temprana. Con el paso del tiempo, su amor por este deporte y su capacidad de auto superación lo catapultaron a lo más alto, logrando medallas en Juegos Paralímpicos y Panamericanos. 

Una parte fundamental de su éxito radica en el apoyo que recibió de su familia. En la entrevista, Gustavo comparte que su padre fue un pilar en su vida, acompañándolo en cada paso de su carrera deportiva. Gracias a esa fortaleza familiar, Gustavo aprendió que con disciplina y resiliencia, todo es posible. 

Hoy, Gustavo sigue mirando al futuro, con su mirada puesta en los Juegos Paralímpicos de Los Ángeles 2028. A pesar de los desafíos, sigue entrenando para representar dignamente a México y, al mismo tiempo, inspirar a futuras generaciones a nunca rendirse. Para Gustavo, no existen los imposibles, y su vida es un ejemplo de que, con esfuerzo, cualquier sueño puede convertirse en realidad. 

Estamos orgullosos de contar con un residente como Gustavo en nuestra comunidad, un atleta y ser humano ejemplo de que “Nada es imposible”  

Hay dos tipos de personas en este mundo. Las que se levantan y ven cómo se mueve el mundo y deciden si se suben o no. Y las personas que se levantan a mover el mundo.